Un baño para cada tipo de familia: Familia Urban
Hace menos de un año que la pequeña Valentina llegó a nuestras vidas para dibujarnos una sonrisa permanente en nuestros rostros. No fue algo premeditado, más bien nos pilló por sorpresa. Pero que bella y dulce sorpresa. Pasamos de ser nosotros, Bonnie y Clyde, al trío calavera, a los tres Mosqueteros. D’Artagnan se sentiría orgulloso de ver como todas las mañanas luchamos juntos para llegar a tiempo a nuestros respectivos destinos. No hay biberón, pañal ni baño que se nos resista. Y es que hacemos un magnífico equipo. Uno para todos, y todos para uno.
Cada momento que compartimos es mágico, aunque tenemos que admitir que no todo es de color de rosa. Alguna que otra vez hemos tenido que hacer frente a algún contratiempo. Pero ¿qué sería de la vida sin retos?
Si tuviéramos que quedarnos con un momento del día como nuestro favorito elegiríamos los instantes cálidos que pasamos juntos en el baño. Ese sentimiento de paz y alegría que nos inunda mientras uno de los dos termina de ducharse y ponerse el pijama, mientras que el otro le peina la suave cabecita a nuestro pequeño angelito entre mueca y risa floja. El ambiente cargado de vaho, el calor de las sonrisas y el amor incondicional de los tres Mosqueteros es el reflejo de nuestra morada. No cambiaríamos nada de nuestro hogar dulce hogar, donde tenemos intención de seguir aprendiendo juntos los gajes del oficio de ser padres primerizos. Los tres unidos podremos con todo y más.
Firmado Los Tres Mosqueteros
Valentina, Marta y Pablo